Hoy quisiera compartir con vosotros una nueva terapia que estoy utilizando con los mayores la cual está resultando muy satisfactoria sobre todo con los de mayor dependencia. Aquí explica un poco de que se trata la terapeuta con quien trabajo Laura González .
Terapia asistida con animales (TAA)
Es el vínculo de afecto establecido con los animales, usado para alcanzar de forma lúdica y rápida los objetivos terapéuticos planteados por el profesional.
En la TAA, el técnico en intervenciones asistidas con animales trabaja durante la sesión junto a los profesionales del centro con el fin de que el perro se comporte como facilitador, motivador o mecanismo de apoyo para el usuario.
En el caso de la TAA aplicada a personas mayores:
- el animal facilita las relaciones sociales con otras personas,
- favorece los recuerdos si han tenido experiencias anteriores con animales,
- la autoestima del usuario mejora si vuelve a sentirse necesario,
- ayuda a la actividad física.
Técnico en Intervenciones Asistidas con Animales (IAA)
Profesional formado en el entrenamiento y manejo de animales y en su aplicación al trabajo con personas (educación, salud, discapacidad,...).
Interviene en programas específicos conjuntamente con el animal, formando un binomio entre los dos.
Un animal específicamente seleccionado y entrenado para integrarse dentro de un programa terapéutico o educativo como una herramienta al servicio de los profesionales del centro.
Objetivos de la TAA:
A través de la TAA podemos trabajar, con nuestros residentes, las siguientes funciones:
Motricidad gruesa y fina: Se realizan distintas actividades a través del perro o motivadas por el perro, que resultan más motivantes y estimulantes para los usuarios mayores que el simple ejercicio físico.
Habilidades de la vida diaria: Se trabajan a través de las necesidades básicas del perro y de los cuidados que requiere
Estimulación cognitiva: Se realizan actividades de estimulación de la memoria a corto plazo, la atención, la concentración, etc. a través del propio perro o de material relacionado con él.A través de las vivencias con animales, se estimula la memoria a largo plazo y el razonamiento.
Expresión y regulación deemociones: A través del perro podemos experimentar y manejar diferentes tipos de afectos, que son más difíciles de expresar en nuestra vida diaria.
Cooperación, trabajo en equipo, socialización: El perro actúa como facilitador de las relaciones sociales, ayudando a prevenir conflictos de convivencia en el centro y creando un ambiente más distendido.
Autoconcepto y autoestima: Con el perro se puede establecer una relación estrecha, basada en la comunicación, la afectividad y el respeto mutuo, y permite que la persona mayor se sienta útil.
Un saludo
Tenemos mucho que aprender aún de los animales.
ResponderEliminarGracias por tu artículo.