Santiago Martínez

Santiago Martínez

jueves, 28 de abril de 2011

La rutina


Hola amigos aquí estoy para compartir con vosotros una pequeña reflexión.

Según la Real Academía Española se entiende por rutina: Costumbre inveterada, hábito adquirido de hacer las cosas por mera práctica y sin razonarlas.

En mis sesiones con mayores intento permitir una mínima rutina: el horario siempre es el mismo, la programación general es la misma, es decir, un día psicoestimulación, otro ocio terapeútico, otro actividad física, otro manualidades... pero nunca una sesión es igual a otra. Intento sorprenderles siempre o cambiando el orden, o introduciendo un tema inesperado. Nunca les digo de que va a tratar la sesión hasta que están en ella. Eso si, siempre explico primero lo que voy a hacer y razono con ellos el porqué se hace. Por ejemplo, esta semana ejercitamos la lectura y la escritura primero les pregunto para qué sirve leer y escribir, les explico los beneficios de practicarlo y después entonces sí nos ponemos manos a la obra. y así en todo.

Una pequeña rutina nos da suguridad y orden. No me gusta el hacer por hacer, las actividades se hacen porque hay un motivo, una justificación, una programación. Y además luchar contra la rutina fomenta la plasticidad neuronal. Buscar siempre algo nuevo diferente, sorprender al que cree que ya está todo visto, con algo, aunque sea pequeño. Reconozco que no es tarea fácil y que no todos los días saldrá las cosas como quiero . Pero por experiencia os digo que uno sale enriquecido. Lo que nos cuesta trabajo suele ser lo que vale la pena.

Y para acabar decir que ni la estricta rutina es buena, ni la ausencia de rutina es buena. Todo en su justa medida. Pero eso ya será otro tema.

Un saludo